El gran reto de erradicar una rara enfermedad tropical que lidera un médico español

La enfermedad de pian está causada por una bacteria espiral que afecta especialmente a niños menores de 15 años. Oriol Mitjá lleva ocho años trabajando en Lihir, una remota isla del Pacífico tratando a afectados por esta enfermedad.

La revista Science ha dedicado la portada de su último número a la investigación desarrollada por el médico español Oriol Mitjá Villar en Papúa Nueva Guinea sobre la enfermedad de pian, también conocida como yaws o frambesia, una dolencia tropical crónica que desfigura y debilita a los afectados y que se extiende principalmente por las zonas más desfavorecidas de África, Asia, Latinoamérica y el Pacífico.

Vista de la isla de Lihir | NASA

La enfermedad de pian está causada por una bacteria espiral (espiroqueta), la Treponema pallidum pertenue y afecta especialmente a niños menores de 15 años (según la Organización Mundial de la Salud -OMS-, el 75-80 % de los afectados), con mayor incidencia en niñas y niños de 6 a 10 años. La enfermedad, de carácter infeccioso y muy contagiosa, se manifiesta como pequeñas llagas o papilomas en la piel que acaban formando úlceras en ausencia de tratamiento. A largo plazo la infección puede extenderse a las articulaciones y los huesos, provocando un endurecimiento de la piel de la planta de los pies y las palmas de las manos y una inflamación de la capa más externa de los huesos.

La OMS promovió en los años 50 y 60 un ambicioso Plan para erradicar la enfermedad de pian en todo el planeta mediante la administración de penicilina inyectable en los afectados. Fueron tratadas más de 50 millones de personas en 46 países y el número de enfermos se redujo un 95% respecto a la situación de partida. Sin embargo y pese al éxito inicial de la campaña las recaídas fueron muy numerosas al no tratarse los casos en que la enfermedad pese a  existir no se manifestaba bien porque se encontraba en período de incubación o  bien porque se hallaba de forma latente, es decir no provocaba los síntomas. Al manifestarse finalmente la enfermedad en estos dos últimos casos, los individuos afectados se convirtieron en fuentes de reinfección. Cómo el pian es una enfermedad muy contagiosa, la situación volvió a ser la de partida, resultando la campaña en términos globales un fracaso. La penicilina inyectable resultó ser un método muy doloroso (teniendo en cuenta que la mayor parte de los afectados son niños) y que necesitaba de medidas higiénicas estrictas para su administración, lo que no es fácil conseguir en las zonas rurales y boscosas de los países en desarrollo donde se propaga el yaws.

En el año 2012, la OMS inició un nuevo Plan para erradicar la enfermedad de pian en el año 2020 en todo el mundo. Y los criterios han cambiado. Si en el anterior Plan sólo se administraba el antibiótico a los individuos que manifestaban la enfermedad, ahora la administración se hará en el 90% de la población donde aparezca un brote, se trate de individuos enfermos con síntomas visibles o no, para prevenir las fuentes de reinfección. Además, gracias a los estudios de Oriol Mitjá,  se ha sustituido la penicilina por un antibiótico oral de amplio espectro, la azitromicina administrado en una única dosis.

Oriol Mitjá Villar

Oriol Mitjá (Barcelona, 1980), quién cursó sus estudios de Medicina en su ciudad natal y obtuvo un Diploma de Higiene y Medicina Tropical en Londres, lleva  ocho años trabajando en Lihir, una remota isla del Pacífico tratando a afectados de la enfermedad de pian. En abril del año 2013, Mitjá estableció Lihir como un punto de referencia internacional en el tratamiento de la enfermedad. Junto con sus colaboradores, consiguieron administrar la azitromicina al 86% de la población de la isla (que cuenta con 18.000 habitantes). Después de un año de tratamiento, los resultados fueron espectaculares. Los individuos enfermos disminuyeron de 323 a 33. Sin embargo, no todo fueron buenas noticias. La infección comenzó a reaparecer después de 24 meses con un aumento significativo a los 42 meses y lo que es peor, algunos de los individuos de Lihir demostraron resistencia a la azitromicina.

Mitjá publicó sus resultados en la revista especializada The Lancet  en abril de 2018. Sus conclusiones son que, pese a la azitromicina ha resultado un antibiótico eficaz para combatir la enfermedad de pian, debería reconsiderarse la actual tendencia de administrar una única dosis de antibiótico al mostrarse ineficiente. Mitjá considera que lo oportuno sería administrar entre dos y tres rondas de tratamiento en intervalos de entre 6 y 12 meses y proseguir los estudios de posibles resistencias, lo que complicaría mucho la larga lucha para la erradicación de esta cruel enfermedad tropical.

Ahora es necesario que los organismos internacionales competentes, en especial la OMS, tengan en cuenta los resultados de Mitjá. Lo que sí parece es que el objetivo de erradicación del pian para el 2020 va a resultar de muy difícil cumplimiento.

Referencias
“A second chance” Martin Enserink; Science  20 Jul 2018: Vol. 361, Issue 6399, pp. 216-221
“Re-emergence of yaws after single mass azithromycin treatment followed by targeted treatment: a longitudinal study” Oriol Mitjá et al. The Lancet; Volume 391, No. 10130, p1599–1607, 21 Abril 2018